Saltear al contenido principal
343-5092481 | Teléfono Fijo: 4071445 [email protected]

Semipermanentes: Mitos y Verdades


Nuestras manos son nuestra carta de presentación, por lo que unas uñas prolijas y estéticas son signo de distinción. Una alternativa muy de moda es el esmaltado semipermanente. Es una técnica que mantiene las uñas perfectamente pintadas por más tiempo gracias a su fortaleza, posee la misma textura y mucho más brillo que el esmalte tradicional. Puede ser aplicado tanto en uñas naturales como artificiales (ya sean acrílicas o tipo gel). Su duración varía entre los 15 y 21 días aproximadamente, gracias a su secado en lámpara UV/LED.

Mito: Afectan la salud de la uña.
Verdad: No, contrariamente a lo que se cree no las daña, lo más importante es que la uña sea tratada correctamente y con buenos productos, y su cuidado posterior (no tratar de quitarlas ni morderlas) garantiza una apariencia perfecta.


Mito: Es necesario dejar “descansar” la uña entre un esmaltado y otro.
Verdad: No es necesario dejar descansar la uña entre una aplicación y otra, en realidad es contraproducente. Lo ideal es removerlas del todo para que descansen, de lo contrario deben ser renovarlas cada 15 días dado que después de ese tiempo comienza a notarse el crecimiento de la uña natural y el esmalte puede comenzar a deteriorarse. De esta forma pueden producirse filtraciones de humedad entre el esmalte y la uña y generar hongos, lo cual además de brindar un aspecto no deseado sobre las uñas, podría traer problemas de salud.

Mito: La luz UV de la lámpara para secar las uñas es perjudicial.
Verdad: No, estas luces son emitidas por LEDs que por su bajo nivel de radiación, espectro de emisión y tiempo de exposición, son inocuas para la salud de la piel. Aún así es posible prevenir cualquier afectación aplicando un protector solar con filtro UV antes de ir con tu manicura.

Mito: Pueden ser removidas en casa.
Verdad: Se puede, pero no es lo indicado, lo recomendado es que lo realice un manicurista porque cuenta con herramientas, insumos y conocimientos específicos para hacerlo. Asimismo estos profesionales cuentan con otros productos que pueden ser aplicados para mantener las uñas fuertes y sanas.


Mito: Requieren mucho cuidado.
Verdad: No requieren mayor cuidado que en el esmalte común, es más, su velocidad de secado y fortaleza superior, evita los usuales “accidentes” luego del pintado. Tampoco es necesario cuidarse del agua. Sin embargo, es recomendado el uso de guantes cuando se realicen tareas con agua (especialmente si es caliente) y productos de limpieza agresivos, eso nos garantizará una duración mayor.

Mito: Es muy caro.
Verdad: Se trata de una técnica más cara que el esmalte común, pero, si tenemos en cuenta su extensa duración, y si necesitamos y/o queremos llevar nuestras uñas siempre pintadas, la inversión es igual o menor que las manicuras comunes necesarias para reemplazarlo.

Mito: Es lo mejor para uñas débiles o quebradizas.
Verdad: La fortaleza de la uña dependerá de la salud de la persona, por lo que si bien es un esmalte fuerte, que puede proteger uñas frágiles, la uña por sí sola no será más resistente. Para mejorar esa situación hay diversos tratamientos que refuerzan la uña natural sin ningún tipo de sistema (esculpido o esmaltado).

Te gustó esta nota? Dejanos tu opinión!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Volver arriba
× ¿En que puedo ayudarte?